Resumen de la naturalidad del software libre
- Detalles
- Escrito por Miguel Tuyaré
- Temario: Textos Libres
- Visto: 993
"...que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son."
Este resumen es un ensayo simple -quizás algo poético- a propósito del gran texto de Hugo Baronti sobre "La acumulación originaria del capital y la gran ilusión del software libre" |cliquear|. Dicho texto reavivó en mi esa mecha siempre encendida del conocimiento como material humano, a veces difuso y disperso, que proviene de la suma de experiencias vividas y de la inclinación que cada ser de este planeta tiene en su interior como persona única e irrepetible que es.
Hace un tiempo redacté un artículo sobre "Jokte! y el arte" |cliquear| que apuntaba en ese sentido. Inicio dicho texto citando a uno de mis artistas favoritos Marc Chagall quien dijo: "el arte es sobre todo un estado del alma". No sé si todo el software libre es arte, sería temerario afirmar eso, pero si puedo afirmar que hay mucho condimento artístico en lo que anda dando vueltas por el éter desde tiempos remotos.
Hugo habla de la "ilusión" del software libre que muy pocas personas están dispuestas a materializar. En efecto, el origen primigenio del arte es la ilusión y traer esa imagen del alma -suma de conceptos, ideas, sentimientos y sueños- y plasmarla en algo visible es tarea ardua por demás, es sacrificio constante y sonante que muy pocos están dispuestos a brindar a la comunidad sin que haya retribución alguna más que algún que otro reconocimiento cuando mucho, a veces ni eso. Pero muchas veces es un sacrificio necesario para alimentar el espíritu personal con ese placer que no se puede describir de "crear", como una urgencia de la propia salud, y es aquí donde nada importa más que el conocimiento en si mismo.
Clic! Seguir leyendo... Resumen de la naturalidad del software libre
Strange Fruit - Billie Holliday
- Detalles
- Escrito por Miguel Tuyaré
- Temario: Letras
- Visto: 8481
A finales de los años treinta, Abel Meeropol un profesor judío de Nueva York quedó impresionado al ver la fotografía del linchamiento de dos afroamericanos en un estado del Sur. Una muchedumbre de blancos de todas las edades, hombres, mujeres y niños, aparecían sonrientes alrededor de los cadáveres de Thomas Shipp y Abram Smith, colgados de dos álamos en medio de la noche. Aquella visión, cruda y desagradable, se le metió en la cabeza y no pudo dejar de pensar en ella durante varios días. Como resultado de esa experiencia escribió el poema ‘Bitter Fruit’ (Fruta amarga), que publicó bajo el seudónimo de Lewis Allan. Ante la excelente acogida, sus compañeros del partido comunista le animaron a ponerle música, y así nació la canción ‘Strange Fruit’. (Aunque más adelante se diría que fue Holiday quien puso música al poema de Meeropols, quedó demostrado que no fue así).
Aquí les dejo el poema traducido al español. Pueden leer más referencias sobre la canción en Wikipedia.
Frutos extraños
Los árboles del Sur tienen frutos extraños.
Sangre en las hojas y sangre en las raíces.
Cuerpos negros balanceándose con la brisa del sur.
Extraños frutos colgando de los álamos.
Una escena pastoral del Sur galante,
los ojos fuera de sus cuencas y la boca torcida,
aroma de las magnolias, dulce y fresco,
entonces, el repentino olor a carne quemada.
El Tararira se nos enamoró
- Detalles
- Escrito por Tux Merlín
- Temario: Anecdotario
- Visto: 341
¡¡¡Al fin vino el Negro Tararira!!! Extrañábamos esa magia de verlo hacer un armado con una sola mano(1). Después de varios días ausente, por el tema de la mudanza, apareció y dijo que cada vez que quiere venir a la costa se acuerda que está viviendo ahora en la loma del orto y le da fiaca.
Le digo: "¿dónde vas a estar mejor que con nosotros Negro?" y le reluce la jeta como un fluorescente.
Junto con el Negro cayó Garúa(2); antes solía andar más seguido con nosotros pero está estudiando abogacía y desaparece por días. Le digo "igual seguirás siendo negro, eso si, ahora serás picapleitos y la vas a juntar con una pala"; y al boludo no le gusta mucho. El gordo Manteca lo bardea preguntándole si lo defendería en caso de que quiera contrabandear al Uruguay y lo agarren.
Ahí al toque, entre los cuatro armamos una expedición a la isla a pescar y a pasar la noche, era sábado y todos al pedo como guardabarro de lancha. El Gordo había conseguido tripa de pollo y tenía un tarro de pintura lleno de lombrices, nos faltaba algo para picotear y armar el equipo de mate. "Yo pongo" dijo Garúa y al rato volvió del almacén con bizcochitos, un paquete con fiambre, un pan casero y una bolsa de papel madera desde donde se asomaba una cogotuda. Todo listo.
Hicimos el acampe al otro lado, donde termina el banco de arena y comienza tierra, y lo primero -como siempre- fue entrar al monte a juntar leña, hacer fuego y preparar el mate. Manteca y el Tararira se pusieron a desenredar la galleta del espinel y después fueron y lo tendieron. Mientras tanto, conversábamos con Garúa:
– Y Garúa… ¿cómo te trata la vida? -le pregunto.
– Bien, mucho estudio loco… es un quilombo la abogacía... tenes que estudiar a lo pavote. A mi me gusta el río y la pesca y no puedo porque esto me lleva mucho tiempo.
– ¿Y te entusiasma lo que estudias?
– Si… más o menos… pero mi viejo me rompe las pelotas para que termine, que ya solo me queda este año y el otro.
Hace un gesto de recordar algo y dice:
– Ahhh!!! Pará, pará… me olvidé de contarte. Me metí en política, en el Centro de Estudiantes. Ahora milito en "Agrupación Forja", seguimos a Leopoldo Moreau…
– ¿Pero vos no estabas con "Franja Morada"? Eso me habían dicho… – lo interpelo.
– Si, pero desde que estos soretes se fueron todos con el PRO, me fui. Son de terror loco… Este que ganó nos va a hacer retroceder 20 años… Después de Gualeguaychú se fueron todos a la banquina…. ¡¡¡no más!!!