Tamaño letra:

La verdad de la milanesa es una frase popular argentina que refiere al eterno debate sobre el origen de este plato tan arraigado en nuestra cultura como el archifamoso choripán, sin embargo tiene raíces españolas según se sabe aunque no es de extrañarse, acá somos crisol de pueblos. En fin, de todas formas este artículo no es culinario sino que hablará de Jokte y sobre su camino cierto de cara al futuro.

Hace muy poco se celebró el JDay Colombia organizado por la Fundación Casa del Bosque, evento que dejó reencuentros, nuevos encuentros y amistades espectaculares -aquí mis impresiones-, pero también marcó un antes y un después en el desarrollo de este CMS acuarelado latinoamericano, soberanamente libre, sin ataduras de ningún tipo, ni siquiera temporales. Digo esto porque hemos lanzado allí, en reiteradas charlas ocasionales y no tanto (me hago cargo), que Jokte tomará otro rumbo diferente al de Joomla, que en breve pasaremos a ser un fork real y no una derivación. Y como diría Antonio Machado: "caminante no hay camino, se hace camino al andar", allí fue nuestro primer paso.

¿Y cuales son los caminos del fork? Primero el empoderamiento tecnologíco como tal, el ejercicio de la licencia GNU/GPL de Joomla para darle otro sentido social al software y otra orientación más agiornada a las necesidades, costumbres y lenguas de América Latina. Segundo, el arduo trabajo de torcer las velas metiendo mano al código puro para que empiece a recorrer una nueva senda aguada, lejos de toda personalización, con un pensamiento más global e intrínseco, ojalá más certero.

El interrogante que salta a la primera es el por qué de esta acción, ¿acaso Joomla no cumple las expectativas? La respuesta es un poco ambigua pero trataré de echar luces sobre la cuestión de fondo.

He resaltado innumerable cantidad de veces las bondades de Joomla y he declarado otras tantos mi amor por ese CMS tan excelso que me permitió salir adelante y proyectarme como desarrollador, trabajar y vivir de y con él, programar a lo tarado, divertirme hasta el hartazgo, colaborar con tutoriales y foro, y una larga lista de etcéteras. El agradecimiento a todos los que participan en él es sublime y sin dilaciones, y los sentimientos que digo siguen intactos como el primer día.

Para encarar Jokte, sin embargo hemos considerado otros matices, algunos ya dichos o enunciados en el Manifiesto de Juuntos: despertar en latinoamérica más luces de creación propia, hacer algo por y para nosotros, co-ayudar en nuestra realidad tecnológica que posee una brecha digital ancha, donde hay culturas que pasan desapercibidas o son avasalladas, para que esas mismas personas se den a conocer en la red de redes; que se auto rescaten por si mismas con herramientas libres al ciento por ciento; que sus lenguas olvidadas, algunas con tendencia a la desaparición se promulguen en el éter y por todas partes; que las necesidades económicas básicas de nuestros pueblos, distantes a mares del capitalismo extremo de grandes urbes, puedan cubrirse tomando Jokte como algo  suyo y con él proyectarse. Tal el fin de lo que buscamos, quizás una utopía, pero como decía Lao-Tsé "un viaje de mil kilómetros se inicia con un primer paso"... es por todo esto y mucho más que surge el fork.

El encontronazo más grave que sucede con Joomla, que es palpable, visible, escuchable y entendible, es su versionado, que adolece en los últimos tiempos de un vértigo claustrofóbico difícil de superar por el común denominador de los latinaomericanos, y no solo de los que desarrollamos webs sino de aquellas pequeñas empresas, entidades sin fines de lucro, colectivos y demás que quieren mantener el CMS en la web porque les resulta excelente y fácil de administrar.

El otro punto crucial y que le hace flaco favor a Joomla, es el constante y hasta casi perverso mercantilismo que lo rodea; una cuestión económica que para los que vivimos por estos lares es de acceso casi prohibitivo, no solo por los costos sino por los medios de pago que aquí practicamente no existen o son inalcanzables.

En otro orden de importancia no menor, está la cuestión del idioma sobre el que Joomla ha hecho grandes cosas. Quizás para algunos que saben inglés es fácil el tema, pero hay una gran cantidad de personas que se autoexcluyen por esta barrera idiomática. Y me refiero no solo al lenguaje propio del software sino a la documentación de ayuda que lo circunda, que es escasa, dispersa y a veces poco precisa. Ni hablar de el área técnica en donde lo mejor que hay está solo en inglés. Y esto no es un reproche sino un hacerse cargo de lo que nos falta.

En conclusión, el fork Jokte tratará de rescatar el espíritu de Joomla basado en el copyleft para irradiarlo de manera profusa sobre América Latina en un círculo que intentará la virtuosidad de la libertad en el sentido más amplio del término. Ojalá lo logremos.

 

"Intentar algo y fracasar es, por lo menos aprender. Pero no hacer el intento es sufrir la inestimable pérdida de lo que pudo haber sido."
(Chester Barnard)